. En francés Saint Jean Pied de Port y en euskera, Donibane Garazi, es una ciudad medieval situada en la región de Aquitania. Estrechamente ligada al Camino de Santiago, destaca por callejuelas empedradas y estrechas, sus murallas y su ciudadela.
Ubicada en torno a una ruta prehistórica que luego se convirtió en vía romana, la villa fue fundada en el siglo XII y se desarrolló pronto como centro comarcal de comercio y comunicaciones. Desde esa fecha, al pie del castillo llamado de Mendiguren, se desarrolló una ciudad fortificada a la que los reyes de Navarra denominaban la llave de mi reino. Felipe III de Navarra le concedió fueros en 1329.
Tras la invasión y conquista de Navarra en 1512, fue ocupada por el ejército de Fernando el Católico y durante ese año fue escenario de frecuentes enfrentamientos que no consiguieron devolver la villa a sus reyes naturales.
Permaneció ocupada por una importante guarnición española de forma intermitente, con períodos en los que pasaba a manos de tropas al servicio de los reyes de Navarra, hasta 1529, cuando Carlos I abandona toda la Baja Navarra por el excesivo coste que suponía su conservación desde el punto de vista logístico y militar. Durante las guerras de religión que asolaron la Baja Navarra en el siglo XVI, sufrió ataques e incendios.
En el siglo XVII, en 1620, Luis XIII de Francia une las coronas de Francia y de Navarra y bajo el gobierno de Richelieu, se construye en la localidad la Ciudadela pensando sobre todo en la defensa de esa zona ante un potencial ataque desde el sur.
En marzo de 1789, se reunieron en San Juan Pie de Puerto los Estados de Navarra, que rehusaron enviar representantes a las reuniones de los Estados Generales en París, en los días de la Revolución francesa, pues defendían que la Baja Navarra no era una provincia francesa, sino un Reino que en la persona de Enrique IV de Francia se había unido al entonces reino de Francia. Al año siguiente, sin embargo, se aprueba la nueva división administrativa francesa, que reúne las tierras de la Baja Navarra y el Béarn en un nuevo departamento.
Durante la Guerra de la Convención, a fines del siglo XVIII, fue el centro desde el que partieron los ataques franceses contra el sur de los Pirineos.